El proceso de colocar implantes dentales es completamente indoloro, no duele para nada. De hecho causa menos dolor que una ordinaria extracción de muelas. Consiste en una intervención quirúrgica mínima.
1. En primer término, es importante aclarar que antes de la colocación de los implantes puede ocurrir que un paciente requiera de alguna intervención dental previa por presentar algún problema anterior, tal como el tener que retirar un diente natural que ya no es posible recuperar o presentar un reducido hueso maxilar que no permita colocar los implantes. Estas intervenciones también suelen ser indoloras.
2. En este sentido, cuando la boca del paciente está lista para recibir los implantes, el odontólogo, en su consultorio, colocará anestesia local en la zona específica donde se introducirá el implante. Muy rara vez un paciente reciba anestesia total, pero en algunos casos se puede realizar.
Entonces, sutilmente se encargará de colocar los implantes de titanio en el hueso maxilar. Con esto, el implante dental es utilizado como raíz para poder anclar los dientes porcelana o prótesis artificiales. Hay casos en los que se puede realizar la instalación del implante con un nuevo método microquirúrgico, que no requiere incisiones con bisturí. En nuestra clínica es frecuente que los pacientes luego de la cirugía, prácticamente no necesiten de analgésicos. Es decir el postoperatorio habitualmente es espectacular.
3. De 3 a 6 meses después de que se produce el proceso de osteointegración, donde el organismo reconoce el material biocompatible del implante y lo incorpora.
4. Finalmente, el odontólogo profesional se encargará de poner en la boca, de manera delicada, las coronas de porcelana o prótesis dentales. Estas prótesis harán las veces de dientes naturales y realizarán de manera efectiva todas sus funciones.
Puede ocurrir que una vez que se colocan los implantes, el paciente sufra algún tipo de molestias en su boca. Por supuesto, esto no es una constante, no todas las personas padecen incomodidades porque no todos asimilan de la misma manera una intervención. De todas formas, el odontólogo recetará analgésicos y antibióticos para apaciguar posibles dolores.